jueves, 6 de febrero de 2014

Oraciones impersonales

El día amaneció bastante mal, muy nublado. a medida que iban pasando las horas, el tiempo iba empeorando cada vez más. Cada vez había más y más nubes. En las calles apenas había gente andando, ni apenas coches en movimiento. En un cruce, había un motón de coches aparcados en todas las direcciones, solo un coches estaba en movimiento. En el mismo cruce había un cuantas de personas andando, que salieron solo porque tenían que ir al trabajo no por otra cosa. A las siete y media de la tarde, empezó a llover de repente, y al empezar a llover muchas personas empezaron a abrir sus paraguas, pero otros sin embargo, tuvieron que empezar a correr, puesto que no se llevaron el paraguas, porque creían que no les iba a llover porque llevaba todo el día nublado, pero sin llover.

No hay comentarios:

Publicar un comentario